Del Mirador Restaurante lo que más podemos decir es… Qué lugar más hermoso y colorido!
La mañana que llegamos el frío era insoportable, pero el delicioso café y desayunos que tomamos bien valió el viaje hasta las cercanías de Jinotega.
Es un negocio familiar que casi tiene una década de labores, y con mucho sacrificio y esfuerzo lo han mantenido abierto, creciendo y ofreciendo cada vez más servicios.
Por ejemplo… No es solo un mirador, sino un restaurante. Y no solo es un restaurante, sino un hospedaje de montaña, en medio de la naturaleza más fresca y más fría, tanto que es difícil para un habitante del Pacífico nicaragüense imaginarse tener que usar suéter, chaqueta y bufanda, y aún así tener frío.
Si lo suyo es el ambiente de montaña, definitivamente le encantará este colorido lugar, ya sea que quiera hospedarse o solo pasar probando el delicioso menú que tienen.